Pues va de lo mismo que han ido los programas de humor de después de comer de los últimos 8 o 10 años, de coger partes de otros programas y de otras cadenas y reirse de los fallos de la gente o de videos graciosos de internet que ya están más vistos que la cara de Cristiano Ronaldo.
El problema que tenemos aquí son los colaboradores que hay.
Empezamos por Fran Blanco, que mejor se hubiera quedado en la radio que era donde mejor lo hacia, aquí sigue el guión de pena y sus dientes separados pueden provocar el terror en los corazones de los más temerosos, imagina que su cara sale de la TV y de repente abriendo esa boca y enseñando esos extraños dientes te pega un bocao'. ¡Asqueroso!
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| Dientes...piano, piano |
Miki Nadal es de vergüenza, poniendo las caritas de estúpido sin gracia y forzando la voz para parecer interesante y a la vez hacer reír. Que asquerosidad de humorista.
Cristina Pedroche luce palmito en la TV, ya que es la chica de moda en España hay que aprovecharla. Lo peor de todo es cuando la mojan, ella hace amagos de no querer, pero en realidad le encanta llevar la camiseta mojada y marcar pechos y sujetador.
Quique Peinado, algo mitad extraterrestre-mitad friki, de piel blanca, gafas de pasta y una barba para esconder su boca con voceras, es difícil de mirar e intenta ser el listo del grupo, aunque la verdad no lo consigue.
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| Y con este que hacemos... |
Y voy a acabar con Ana Morgade, la chica es la única que se salva de este plantel de vergüenza que siguen un guión que pronuncian al pie de la letra con chistes que solo le hacen gracia a la gente que no ha desarrollado el sentido del humor más de los 12 años. Hay más colaboradores sacados de algún club del chiste cutre, pero voy a pasar de hablar de ellos.
En resumen lo mejor del programa es que su nombre, ZAPEANDO, te invita a que lo quites y veas otra cosa.
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| La pobre chica no tiene competencia dentro de Zapeando |
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